ARGYNVOSTHOLT

Los gritos constantes en la abadía hacen que los aventureros tengan una pésima noche, en este lugar más que un convento parecía un manicomio, Freya pierde un poco de cordura con los constantes gritos y llantos de los amalghomos, muy discordantes para su armonía con la música y la naturaleza. A la mañana siguiente el grupo habló con el Abad quien tenía tristes noticias, lamentablemente los poderes de él no eran suficientes para eliminar la maldición de Alexus, por fortuna sabía dónde buscar y era en la antigua mansión de Argynvostholt, el grupo agradeció la información y se dirigió a la sinuosa senda de la derruida mansión. Al aproximarse muy por encima del valle del río emerge en la mansión sepulcral, sus torretas cubiertas con conos de fantasía y sus torres revestidas de almenas esculpidas notaban la magnificencia del lugar. 


Una tercera parte de la estructura se ha derrumbado, al igual que una parte del techo, pero el resto parece intacto. Una oscura torre octogonal se alza por encima de la arquitectura circundante. Fuera de la niebla viene un distante retumbar del trueno de forma rápida acompañado por el aullido de los lobos en el bosque, El grupo se baja del carruaje otorgado por el Abad, todos a excepción de Vasilka quien en su vestido de novia solo gruñe dentro del vehículo. La casa estaba en silencio, y el guerrero Alexus se acerca a una enorme estatua de un dragón que se encontraba en la entrada, la bruja Syndra decide detectar si la estatua emana algún tipo de magia, por su parte Elizabeth escucha en su cabeza una voz que le dice: Ya estás cerca de recuperar tu poder hija mía. 


Elizabeth con esas palabra en mente decidió adelantarse a investigar por la parte derrumbada de la mansión, lamentablemente fue un error pues un grupo de arañas gigantes que la atacaron sin piedad y hubiera muerto de no ser por el grupo que fue en su auxilio.


Luego de la fuerte batalla el grupo investigó el primer nivel pero temeroso por encontrar algo similar a las arañas fueron más cautelosos, allí pudieron observar varios cuadros de guerreros con una armadura igual a la portada por Alexus, al parecer estos guerreros pertenecen a la misma orden del joven. 


Luego de investigar un poco la alacena del lugar, el grupo pudo escuchar ruidos de un hombre que solicitaba ayuda, este era un elfo llamado Savid quien luego de ser curado un poco por Lion, expreso la siguiente información:

Argynvost era un dragón de plata que le gustaba asumir forma humana. Argynvostholt fue el hogar del dragón, en apariencia humana, el noble dragón comandó a un grupo de caballeros llamados la Orden del Dragón de Plata. Ellos dieron cobijo a los refugiados que habían llegado al valle para escapar del ejército de Strahd, pero luego los soldados de Strahd mataron al dragón, destruyeron la orden y saquearon la mansión, por lo mismo los Vistani y los elfos del atardecer evitan la mansión, en la creencia que el fantasma del dragón atormenta la mansión.

Con esa información clara era obvio que el pasado de Elizabeth y Alexus tenía relación con este lugar, por lo que sin dudar subieron al siguiente nivel de la mansión, Syndra convocó a Mavis para que se adelantara para investigar un poco pero fue inmediatamente asesinado por algo hecho de humo, el grupo preparado fue a revisar encontrando una figura de un diablillo hecho de humo que atacó al grupo.


Alexus al eliminar el mal del lugar convocó una ola atronadora cuyo sonido alertó a otros seres indeseables a la batalla, un grupo de guerreros fantasma que atacaron sin piedad a Syndra quien se encontraba cerca de ellos, pero gracias a Lion, Ezmeralda y Rothman los lograron exterminar, Freya recordando las profecías de las cartas mencionó: Aquí encontraremos es símbolo de fuerza y de esperanza, la carta decía que el tesoro se encuentra en la casa de un dragón, en manos de un ser limpio ahora corrompido, podría ser este mmmm dragón. Con la frase de Freya el grupo concluye que para salvar de la maldición de Alexus y liberar a Barovia, no se pueden ir sin tener este símbolo.




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